Hacia una España Mejor

lunes, marzo 25, 2013

El Apocalipsis del siglo XXI

A diario tenemos ocasión de presenciar y escuchar tanto en televisión como en radio, el desarrollo de las diversas tertulias en las que participan políticos y periodistas. La intervención de los tertulianos es muy respetable y cada uno de ellos opina y defiende aquello que él cree en lo que se concreta cada tema de los allí debatidos. Pero siempre hay excepciones y en esas tertulias te encuentras con alguno de los participantes que intenta defender lo indefendible y justificar lo injustificable cuando a los ojos de los ciudadanos es una clara realidad que solo tiene un significado. Alguno de estos tertulianos, suele ponerse en evidencia como es el caso de uno de ellos, periodista él, por cierto su participación en estas tertulias es un verdadero show, que cuando se estaba debatiendo en una emisora de televisión el tema de los desahucios intentó justificar la postura de los bancos lo cual provocó el que a algunas personas del público asistente se les escapara un grito de disconformidad a lo que el aludido contestó diciendo que él “tenía casa porque tenía estudios”. Al parecer el que no tiene estudios no tiene derecho a tener un techo donde vivir. Por lo visto el tertuliano en cuestión no se acordó de Amancio Ortega, el propietario de Zara. Esta desafortunada intervención del tertuliano me recordó cuando al principio de la democracia algunos con título universitario se mostraban contrarios a que el voto de un trabajador tuviera el mismo valor que el suyo. Por cierto, este tertuliano ha dicho en repetidas ocasiones que lo de Urdangarin, hechos parecidos, se dan en Inglaterra y no pasa nada. Se olvida de que hace siglos la reina Isabel de Inglaterra dio el tratamiento de “Sir” a un pirata y comerciante de esclavos llamado Francis Drake, al que colmó de títulos y condecoraciones, que se dedicaba a abordar y saquear a cualquier barco, principalmente español, que se cruzara con el suyo, y que comportaba el que él y sus hombres se enriquecieran y que parte, buena parte de esa riqueza, iba a parar a las arcas de la corona de Inglaterra. Después de consentirle todo esto a Drake ¿van a hacerle ascos a algo parecido a lo del yerno del rey? En lo que a mí respecta, creo que a otros también, cada vez que este tertuliano intenta justificar o desligar a alguien de alguno de los escándalos que están ocurriendo, más dudas me asaltan sobre la honestidad de sus defendidos. Tuve oportunidad de escuchar a los tertulianos en el día siguiente a la entrega de los Goya, y alguno de estos ha manifestado que este evento fue aprovechado por los actores para dar un mitin cuando solo se limitaron a hablar de la realidad del momento y de lo mal que lo está pasando mucha gente. Quiero recordar la intervención de Maribel Verdú, ofreciendo el Goya a todos los españoles que lo están pasando mal, sin nombrar para nada al Gobierno. Como no podía ser menos y siguiendo la costumbre, los clasificaron de “gente de izquierdas”. No se si la gente del arte, de la cultura en todas sus manifestaciones, es de derechas o de izquierdas, lo que ocurre es que aquello que ellos defienden que no son ni más ni menos que el progreso, la libertad de expresión y la paz y el bienestar, es lo que los partidos de izquierdas también quieren salvaguardar. Lo que sucede es que este tipo de tertulianos que tachan esto de mitin, son los mismo que en su trabajo como periodistas o políticos dicen que cuando los sindicatos promueven una manifestación solo buscan su “interés particular”, o que cuando los “indignados”, que cada vez son más numerosos, se manifiestan, no son más que “una pandilla de exaltados” y lo mismo dicen de los que están contra los desahucios y de los trabajadores de la Sanidad y de la Educación. Para ellos no son “exaltados” los que se lanzan a la calle protestando contra el aborto o el divorcio, protestando contra estas leyes aprobadas por Congreso y Senado. Para ellos los ciudadanos “modélicos” y “sensatos”, son los que se callan y sufren en silencio el paro, el desahucio, el hambre y la muerte -esto último por los que decidieron quitarse la vida al ser desahuciados- los Cuatro Jinetes del Apocalipsis del siglo XXI. Cuando veo “actuar” a alguno de estos tertulianos que se han erigido en defensores de lo indefendible a más de intentar justificar lo injustificable y de pretender enterrar la evidencia, siento temor porque me parece estar asistiendo al regreso de los fantasmas del pasado. Fantasmas tales como el de aquel ministro de Propaganda nazi que penetraba con sus alienantes discursos en la mente de las personas hasta hacerles creer en una realidad falsa cuando la verdad era otra muy distinta: esta solo anunciaba la destrucción de la humanidad, que era lo que perseguía el demente que lo nombró. En fin, solo espero que no salga alguno de estos tertulianos diciendo que soy un “mitinero” exaltado.