Menos es nada

Indigna el comprobar a diario como desde el Partido Popular se manifiestan con críticas llenas de frivolidad contra la decisión del Gobierno de habilitar una ayuda de 420 euros a todos aquellos que estén parados y que no cobren ningún tipo de subsidio o ayuda. Evidentemente esto no entra dentro de los planes de la derecha ya que su estrategia pasa por que en España se instale la miseria, la indigencia y en definitiva los cuatro jinetes del Apocalipsis: La guerra, el hambre, la peste y la muerte. Esto, sin duda alguna, crearía las condiciones precisas para que el líder, pendiente del examen de las próximas elecciones legislativas para obtener ese título en propiedad, el de líder de la derecha, pudiera auparse al pódium del Gobierno. A Mariano Rajoy y a sus adláteres les importa un pimiento el que la gente esté mejor o peor, para ellos cuanto más peor mucho mejor para sus intereses electorales.
No se puede ir por ahí haciendo chistes y chascarrillos sobre esta ayuda de 420 euros, esto no es tirar el dinero ni es un parche como afirman desde el PP. Esto supone, para los que no tienen nada, ni trabajo ni subsidio de paro, el poder, muchos de ellos, seguir pagando las hipotecas de sus viviendas y por ello el seguir conservando y disponiendo de un techo decente. La vivienda es fundamental para mantener unida a una familia. En el plano alimentario nadie se va a morir de hambre en este país para eso está la respuesta de los familiares de aquellos que se han quedado sin nada y están las instituciones del Estado para que esto no suceda. Esta solución de emergencia siempre se ha dado en los tiempos difíciles hasta que los afectados han recuperado su poder adquisitivo. Lo que es difícil de recuperar es la pérdida de la vivienda, y esta medida del Gobierno puede contribuir a que esto no ocurra.
Ya está bien de críticas irresponsables y de intentar medrar políticamente aprovechándose de las desgracias de muchos ciudadanos. En vez de criticar por criticar sin aportar propuestas de solución, lo que Rajoy los suyos deben hacer es una política opositora constructiva y no dedicarse al chiste a y la frase hiriente, ácida y cruel para los que se han quedado sin nada y esperan que todos los partidos políticos, todos, arrimen el hombro para buscar soluciones y no aprovecharse, con fines políticos, de una situación que está llevando a miles de ciudadanos al borde de la desesperación.
Pero para el PP solo existen las escuchas “ilegales”, el intentar tapar sus casos de corrupción, que se les multiplican cada día que pasa y ver de recomponer la figura de Francesc Camps, el que “no” conocía al Bigotes ni sabía nada de los trajes. El PP no aporta soluciones a la crisis porque no las tiene ni se ha preocupado de buscarlas.