Hacia una España Mejor

miércoles, octubre 31, 2007

Los "cuñaos"

El “mérito y la capacidad” del “cuñao” de Rajoy, Manuel Fernández Balboa, que era el requisito que se exigía para ocupar plaza en la Dirección Económica Financiera de la Fundación Cidade de Cultura, como director financiero, les costó a los gallegos la friolera de 380 millones de euros cuando el presupuesto destinado al proyecto de la Cidade de Cultura era de 108 millones de euros.
Veamos. Méritos, lo que dice méritos, los reunía Manuel Fernández Balboa, porque el solo hecho de ser “cuñao” de Rajoy, ya es de mucho mérito. En cuanto a capacidad, lo que se dice capacidad, no es que el “cuñao” la tuviese por que ocupar un cargo de tanta responsabilidad con la única experiencia de haber prestado sus servicios durante un año en una empresa de gestión de residuos no es como para que se pueda llegar a lograr una gran capacidad de conocimientos que puedan servir para ser un ejecutivo eficaz. Pero no creo que la capacidad fuera muy significativa por que a un señor, en este caso al “cuñao”, cuando le preguntaron bajo que condiciones fue contratado y cómo fue retribuido, no fue capaz de recordar ambas circunstancias, por ello su cerebro no tiene que ser muy “esponjoso” y por tanto ser incapaz de absorber en tan poco tiempo, un año, lo que se necesita saber para administrar tanto dinero.
Y hablando de “cuñaos”, me viene a la memoria otro “cuñao” famoso, el “cuñao” de Zaplana, Justo Valverde, un señor proveniente del estamento militar y al que Zaplana puso colocó director de contrataciones durante el desarrollo de las obras de Terra Mítica. No voy aquí y ahora a repetirme sobre las “atrocidades” económicas que se han cometido en dicho Parque Temático por que de sobra son conocidas por todos. Los miles de millones de pesetas de sobrecostes sin justificar andan bailando por ahí cual miles de mariposas en el bosque. Lo que nos demuestra que no todos los “cuñaos” sirven para manejar dinero, ¿o si?, a lo mejor lo saben manejar mejor de lo que yo pueda creer. Lo que puede ocurrir es que lo manejan de modo y manera que uno ve el dinero y de pronto no lo ve. Lo que nos puede llevar a la conclusión de que más que unos expertos en finanzas lo que realmente resulta es que son unos verdaderos magos. La verdad es que todo esto puede ser una especie de “enredo de familia”. ¡Cuñaooo!