Los derechos sociales

Hace unos días charlábamos varios amigos sobre el mantenimiento del Estado del Bienestar; uno de estos amigos, por cierto votante del PP, ante el temor y las dudas expresadas por otro componente del grupo dijo lo siguiente: Tranquilo, mientras gobierne Zapatero las conquistas sociales que ha logrado la clase trabajadora no sufrirán merma alguna, más bien crecerán, afirmó refiriéndose a las pensiones en particular. No pude evitar un gesto de extrañeza por sus palabras y no por que desconfíe de Zapatero sino por que esas palabras venían precisamente de un votante del PP y no sabía si estaba ironizando o hablando con franqueza. Advirtió mi gesto y aseguró que estaba hablando totalmente en serio.
Recientemente Zapatero ha dejado bien claro que la sanidad, la educación y las pensiones “son valores históricos del socialismo político y sindical y que nadie se atreve a discutir hoy públicamente, aunque haya quien intente horadarlos”. Sin duda alguna estos tres aspectos sociales se van a ver potenciados y la asistencia sanitaria pública universal seguirá atendiendo a todos los ciudadanos sin excepción y en educación el Gobierno está trabajando para garantizar la gratuidad en el tramo de 0 a 3 años.
Viendo actuar a Zapatero los ciudadanos pueden tener muy claro y muy Seguro que los problemas económicos del país nunca pasarán por reducir progreso y en particular los derechos sociales como se ha venido haciendo años atrás cuando gobernaba la derecha. Se acabaron los “ajustes” para reflotar la economía utilizando como salvavidas el recorte de los derechos sociales de los trabajadores. Esto, mientras gobierne Zapatero, no va a ocurrir. Con Zapatero en el Gobierno no cabe aquello de si se es de centro o de centro-derecha, que es la cuestión que se plantea eternamente la derecha para nadar y guardar la ropa. Zapatero no oculta a nadie que es de izquierdas y que la política social que va a aplicar será la propia de la izquierda. Esa claridad se refleja en la efectividad, no se puede ir con medias tintas por que quien no tiene claro donde está ideológicamente jamás puede actuar con eficacia, aunque en política social la derecha sí sabe donde está, está por la política social limosnera con la que se ha identificado siempre.