Dios proveerá

Corto y simple comentario merece esta inyección de 100.000 millones de euros que la Unión Europea ha aplicado a España. Se habla de rescate, que de rescate no, que se trata de un préstamo y yo digo ¡qué más da! Aquí lo importante es el aclarar si ese dinero va a servir para dinamizar y activar la economía española, si se va a emplear en abrir el grifo del crédito a empresas, autónomos, emprendedores y a las familias, pero parece que los tiros no van por ahí, el Gobierno de Rajoy ha dejado bien claro que este dinero va a ir a parar a la banca y esto lo intentan disfrazar diciendo que va a beneficiar a los españoles. Mentira. Los 100.000 millones de euros van a servir para que los bancos tapen sus agujeros y a partir de ahí ya veremos qué es lo que va a quedar para los demás.
Yo tengo la sensación de que los empresarios, los autónomos, los emprendedores y las familias, van a tener que encomendarse a la divina providencia. De hecho desde el PP ya se están enviando mensajes de forma constante y muy clara. Recientemente la ministra de Trabajo, Fátima Báñez, ha dicho que está muy emocionada, porque “un capote de la Virgen del Rocío siempre llega y la embajadora universal de Huelva nos ha hecho un regalo en nuestra salida de la crisis y en la búsqueda del bienestar todos los días de los ciudadanos”. Esto lo ha ratificado el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, del PP, diciendo: “Los sevillanos, en términos generales, creen mucho en Cristo, y en esta época en que se está pasando tan mal, confían en su ayuda para salir adelante”. Por si había alguna duda la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, en su primer Debate Sobre el Estado de la Ciudad, ha dicho que su ideario es “Grecia, Roma, Cristianismo, Europa”. Está claro, todos nos remiten a la divina providencia y creo que llevan razón, a los que verdaderamente necesitan que les lleguen los dineros del rescate, préstamo o lo que sea ¡qué más da! no les va a llegar un solo céntimo, más bien les va a costar dinero de su exhausto bolsillo, porque esto va a ir acompañado de más recortes y sacrificios. Esto es pan para hoy, para algunos, y hambre para mañana, para la mayoría, o lo que es igual o peor: Engordar para morir. ¿Qué es de Carlos Dívar, ha dimitido ya?