¡Esto es Jauja!
Nos cuenta el periódico “El Plural”, que los Príncipes Felipe y Leticia, han estado de gira por los EEUU, y que haciendo un hueco en su apretada agenda inauguraron en Manhattan la escuela de negocios el IESE. Que según el citado periódico es el brazo formativo que el Opus Dei puso en marcha en 1958 en Barcelona capital.
Según el medio informante al Príncipe le escribieron un discurso en el que entre otras cosas y poniendo de manifiesto una total y absoluta ignorancia sobre lo que está pasando en España y como consecuencia de ello a los españoles, claro, que bien pensado ¿porqué lo tiene que saber? ojos que no ven corazón que no siente, dijo lo siguiente: “Nuestros precios y salarios están marcando el ritmo del retorno al sendero de la competitividad y, al mismo tiempo, nuestras familias están reduciendo sus niveles de deuda mientras mejoran su ahorro”. Deduzco de sus afirmaciones que cuando se refiere a “nuestras familias”, está pensando en la suya, la familia Real, y en la de su esposa. Otra deducción no cabe. Al menos yo no la veo.
Y para no ser menos que su padre, el Rey, que felicitó a Rajoy por el “éxito” del préstamo por parte de la UE de 100.000 millones para la banca, el Príncipe le ha “echado” un cable al presidente del Gobierno y afirmó lo siguiente: “Nuestro Gobierno está introduciendo reformas más profundas que deberían ponernos en camino de corregir los desequilibrios económicos que hemos acumulado en épocas recientes”.
O sea, que este viaje por EEUU, cuyo costo corre a cargo de esas familias que según el Príncipe están “reduciendo sus niveles de deuda mientras mejoran su ahorro” ha servido para mayor gloria del Opus Dei y para decir al mundo entero de que España es Jauja, donde todo es prosperidad y abundancia gracias a que “nuestro Gobierno está introduciendo reformas muy profundas que deberían ponernos en camino de corregir los desequilibrios económicos que hemos acumulado en épocas reciente”. Reformas tan “profundas” que no afloran en modo alguno y que cada vez en España lo tenemos peor.
Yo comprendo que cuando uno está montado encima del burro, no se dé cuenta de que los que van a pie lo están pasando muy mal y que por ello no se percate el Príncipe de que no está al alcance de nuestras jóvenes parejas que quieren formar un hogar y una familia, el construirse un palacete como él lo ha hecho, ya quisieran ya que los bancos les concedieran una hipoteca de por vida para poder comprarse un modesto pisito, hasta eso lo tienen complicadísimo, y no digamos el tener familia, hijos, eso es algo que, sin estar regulado como en China, les imposibilita el tener más de un hijo si no cuentan con la ayuda de los abuelos, siempre, eso sí, que tengan la suerte de que los yayos se mantengan aún un poco en forma y puedan cargar con los nietos, tarea está bastante pesada y en ocasiones poco agradecida. Esto de tener muchos hijos sin poner en peligro el puesto de trabajo de uno de los dos, es algo que a los miembros de la Familia Real les tiene sin cuidado y ahí tenemos la prueba y no será porque los yayos, el Rey y la Reina, les ayuden a criarlos, no, para eso ya tienen a sus sirvientes.
En fin, creo que el Príncipe no repasó el discurso que le escribieron antes de leerlo en público y de ahí que haya hecho pública su coincidencia con el Gobierno de forma tan desafortunada.
Según el medio informante al Príncipe le escribieron un discurso en el que entre otras cosas y poniendo de manifiesto una total y absoluta ignorancia sobre lo que está pasando en España y como consecuencia de ello a los españoles, claro, que bien pensado ¿porqué lo tiene que saber? ojos que no ven corazón que no siente, dijo lo siguiente: “Nuestros precios y salarios están marcando el ritmo del retorno al sendero de la competitividad y, al mismo tiempo, nuestras familias están reduciendo sus niveles de deuda mientras mejoran su ahorro”. Deduzco de sus afirmaciones que cuando se refiere a “nuestras familias”, está pensando en la suya, la familia Real, y en la de su esposa. Otra deducción no cabe. Al menos yo no la veo.
Y para no ser menos que su padre, el Rey, que felicitó a Rajoy por el “éxito” del préstamo por parte de la UE de 100.000 millones para la banca, el Príncipe le ha “echado” un cable al presidente del Gobierno y afirmó lo siguiente: “Nuestro Gobierno está introduciendo reformas más profundas que deberían ponernos en camino de corregir los desequilibrios económicos que hemos acumulado en épocas recientes”.
O sea, que este viaje por EEUU, cuyo costo corre a cargo de esas familias que según el Príncipe están “reduciendo sus niveles de deuda mientras mejoran su ahorro” ha servido para mayor gloria del Opus Dei y para decir al mundo entero de que España es Jauja, donde todo es prosperidad y abundancia gracias a que “nuestro Gobierno está introduciendo reformas muy profundas que deberían ponernos en camino de corregir los desequilibrios económicos que hemos acumulado en épocas reciente”. Reformas tan “profundas” que no afloran en modo alguno y que cada vez en España lo tenemos peor.
Yo comprendo que cuando uno está montado encima del burro, no se dé cuenta de que los que van a pie lo están pasando muy mal y que por ello no se percate el Príncipe de que no está al alcance de nuestras jóvenes parejas que quieren formar un hogar y una familia, el construirse un palacete como él lo ha hecho, ya quisieran ya que los bancos les concedieran una hipoteca de por vida para poder comprarse un modesto pisito, hasta eso lo tienen complicadísimo, y no digamos el tener familia, hijos, eso es algo que, sin estar regulado como en China, les imposibilita el tener más de un hijo si no cuentan con la ayuda de los abuelos, siempre, eso sí, que tengan la suerte de que los yayos se mantengan aún un poco en forma y puedan cargar con los nietos, tarea está bastante pesada y en ocasiones poco agradecida. Esto de tener muchos hijos sin poner en peligro el puesto de trabajo de uno de los dos, es algo que a los miembros de la Familia Real les tiene sin cuidado y ahí tenemos la prueba y no será porque los yayos, el Rey y la Reina, les ayuden a criarlos, no, para eso ya tienen a sus sirvientes.
En fin, creo que el Príncipe no repasó el discurso que le escribieron antes de leerlo en público y de ahí que haya hecho pública su coincidencia con el Gobierno de forma tan desafortunada.
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