Hacia una España Mejor

lunes, julio 24, 2006

¿PAZ O VICTORIA?


Cuando el pasado 22 de marzo, precisamente el día de san Bienvenido, ETA anunciaba un alto el fuego permanente para el día 24 del mismo mes, la inmensa mayoría de los españoles celebramos, sin pretenderlo, dicha onomástica. Sin duda alguna fue un día de alegría que abrió paso a la esperanza de que en un futuro más o menos cercano en España fuera posible que acabaran las acciones terroristas de los etarras. Comenzaba a trazarse el camino de la paz.
Ese sendero ya lo están recorriendo aquellos que desean materializar esa esperanza de la mayoría de la sociedad española. Es un camino difícil, con muchos obstáculos que hay que ir eliminando paso a paso. Pero a medida que se va avanzando y el camino se hace más transitable y ello nos permite pensar que se va a poder llegar al punto de encuentro, surge un partido político que a medida que se va limpiando la vía pone cada vez mayor ardor en mantenerla llena de obstáculos. Estos obstáculos no son otros que el empleo de la mentira, del insulto, de la falta de asumir lo que este partido hizo en época no muy lejana cuando las circunstancias eran las mismas que se están dando ahora, es decir, el alto el fuego de ETA. Antepone su interés partidista y su intolerante e intransigente ideología al interés de los ciudadanos. Cuando en un proceso de paz se aboga por derrotar y humillar, cuando se defiende a toda costa el que haya vencedores y vencidos, se están creando rescoldos que en un futuro pueden volver a activar el fuego. La historia nos puede dar muchos ejemplos de ello.
Como dijo Tito Livio. "Es mejor y más segura una paz segura que una victoria esperada". Que la victoria sea la de conseguir entre todos la paz.