Hacia una España Mejor

martes, agosto 15, 2006

POR LA BOCA MUERE EL PEZ


En la cada vez más clara actitud victimista adoptada por la Generalitat Valenciana con respecto al mal trato que según el Gobierno del PP le dispensa Zapatero a la Comunidad Valenciana (CV) hasta el punto de que dicen que Zapatero está haciendo todo lo posible para que la CV se hunda, se llega, en todos los casos en que esto lo plantean ante la opinión pública, a ejercitar la mentira más burda y sobre todo a la falta de respeto a la inteligencia de los valencianos.
Todos recordamos cuando desde Aragón se mostraron contrarios a que se trasvasara agua del Ebro a la CV. El PP tachó de insolidario al Gobierno de Aragón y acudió a aquel argumento de que "los ríos son de todos los españoles". Pues bien, hace unos días el conseller de Agricultura Pesca y Alimentación, Juan Cotino, denunciaba y censuraba al Gobierno central por permitir a flotas foráneas pescar en el Mediterráneo. En concreto se refería a barcos de pesca procedentes de Galicia, Canarias y Portugal. Dejando a un lado a Portugal, sí paso a considerar que al igual que los ríos, los mares, las aguas territoriales españolas, son también de todos los españoles ¿o no?. Pero una vez más mentía descaradamente un miembro del Gobierno Valenciano. Al día siguiente de producirse esta crítica por parte del conseller Cotino, el secretario de Pesca Marítima del Ministerio de Agricultura, Juan Carlos Martín Fragueiro, salía al paso de la misma aclarando que no había tal permiso, ni mucho menos ampliación de del mismo, para que más barcos foráneos pescaran en el Mediterráneo, sino que de lo que se trataba era de seguir permitiendo a los que lo vienen haciendo desde hace mucho tiempo que pudieran seguir pescando.
Ahora ese principio de solidaridad, de unidad, de que no se rompa España, de que con el Estatut Catalá habría españoles de primera y de segunda, parece ser que para el PP ya no cuenta. Si en Galicia y en Canarias no hay pesca para que sus barcos palangreros puedan faenar en aguas del Atlántico que se fastidien, que se queden en sus puertos. El Mediterráneo, la parte que nos toca a los valencianos, es nuestro y solo nosotros y nadie más que nosotros, tiene derecho
a pescar en sus aguas. Según el PP, claro.
En fin, por la boca muere el pez.