Hacia una España Mejor

lunes, marzo 03, 2008

Absurda oposición


Cuando el Partido Popular ha estado estos cuatro últimos años dando su batalla opositora en la Comunidad Valenciana, en la Región de Murcia y en la provincia de Almería, tomando como estandarte el trasvase del Ebro, de pronto se va Rajoy a dar un mitin en Zaragoza y nos sale diciendo que hay que zanjar toda esta absurda polémica.
Ahora resulta que el PP ha estado durante cuatro años practicando una oposición absurda, principalmente en la Comunidad Valenciana, y confirma que toda aquella movida de miles de agricultores manifestándose contra el Gobierno de España era un absurdo. Desde luego esto no puede extrañar a nadie, ya nos tiene acostumbrados el PP a aquello de donde dije digo quise decir Diego, a la mentira, a la confusión y a la crispación. No hay más que recordar, por que olvidar lo que se dice olvidarlo todo no es bueno, aquello del Plan Ibarretxe de que se rompía España y el Gobierno dejó dicho plan en agua de borrajas, o de que se iba a anexionar Navarra al País Vasco, hoy el PP gobierna en Navarra con el apoyo de los socialistas y de que con el Estatuto Catalán se iba a romper España. Fue la política del absurdo, de la sinrazón, del catastrofismo infundado, era hablar por hablar porque no tenían, ni tienen, argumentos sólidos ni validos para atacar la gestión del Gobierno de Zapatero y para intentar ocultar y hacer que los ciudadanos olviden lo del pacto de las Azores que desencadenó la guerra de Iraq, o lo del “Prestige”, lo del 11-M o lo del Yak-42. Ya se que puedo resultar redundante pero es que es necesario insistir en lo que lo que la derecha ha estado haciendo durante estos cuatro últimos años: burlarse de los españoles y faltarles al respeto despreciando su inteligencia.
Esto de tildar de absurda la polémica del agua, polémica total y absolutamente unilateral ya que solamente el PP ha sido quien ha estado insistiendo sobre el tema del Ebro, es la guinda que le han colocado a un pastel que al final se tendrán que comer ellos solos y que más bien les resultará amargo que dulce. Los españoles tienen la palabra el próximo domingo y espero que su voto no le sea dado de forma absurda a quienes ejercitan tan absurda como descarada actitud a la hora de ejercer su papel de oposición.