Funeral en el Congreso

En las imágenes que la televisión nos ofreció de la intervención del ministro de Economía, Luís de Guindos, en el Pleno del Congreso de los Diputados celebrado el pasado miércoles, me pareció, por su semblante, ver al ministro, un tanto desubicado, daba la impresión de que se encontraba en una sala velatorio de un tanatorio, la cara de funeral que mostraba era impresionante. La verdad es que no le faltaba razón para observar tal gesto en su rostro, el hombre estaba, eso se veía a la legua, bastante preocupado, más que preocupado asustado diría yo, y es comprensible porque sus palabras fueron lapidarias: Si en los próximos trimestres no se consigue modificar la situación económica de los últimos cinco años “será imposible que se sigan manteniendo las prestaciones sociales”, recordando que es la falta de crecimiento económico y de empleo lo que “pone en riesgo” el Estado del Bienestar, y no las medidas del Gobierno. Decir que la falta de crecimiento económico y de empleo pone en riesgo el Estado del Bienestar, solo pone de manifiesto que el ministro ha perdido los papeles y el rumbo, vamos que no sabe donde está, pues el Estado del Bienestar, ya no existe hace tiempo que se lo han cargado ya precisamente con las medidas que ha adoptado el Gobierno en estos últimos meses.
Esta advertencia del ministro me parece un tanto gratuita y fuera de tiempo, pero echar la culpa a la falta de crecimiento y de empleo intentando dejar fuera las medidas del Gobierno, hace que uno se pregunte: ¿Pero las medidas que está aplicando el Gobierno no son para propiciar el crecimiento y la creación de empleo? Si no lo son ¿entonces para qué son? La verdad es que uno no entiende nada y cada día que pasa menos, el Gobierno está confuso, agobiado y agotado, falto de las ideas y de las iniciativas y proyectos necesarios para evitar que ese catastrófico anuncio que el pasado miércoles hizo el responsable de Economía en la Cámara Baja sea una realidad y que se nos ponga a todos cara de funeral. Pero el que un ciudadano de a pie no entienda nada no es lo verdaderamente preocupante, lo preocupante es que no tengo claro si el Gobierno, Rajoy, ha llegado a entender bien en qué situación estamos y que es lo que realmente está pasando. Resulta que cuando la prima de riesgo lleva unos días a la baja la cosa no mejora y buena prueba de ello es el anuncio del ministro De Guindos. Está claro que al final vamos al rescate y este tipo de intervenciones no se pueden hacer cuando el “enfermo” está a las puertas del más allá sino cuando sus “defensas” aún se mantienen aunque sea bajo mínimos. En fin, ellos sabrán, si es que saben algo, claro. En lo que a mí respecta una cosa si me ha quedado clara: Las medidas que ha adoptado el Gobierno no son para provocar el crecimiento y crear empleo. Lo ha dicho De Guindos.