No era necesario
No es mi costumbre meterme en los actos internos de los partidos políticos, pero es que me ha llamado la atención la arenga que el pasado domingo les “endilgó” desde Valencia Esteban González Pons, a los afiliados y simpatizantes del Partido Popular. Yo creo que era de todo punto innecesaria. Considero que no era imprescindible hacerle saber a voz en grito a los votantes del PP que “todo lo que se dice es mentira” como aseguró González Pons, ellos ya lo tienen más que claro y lo confirma el hecho de que creen a pie juntillas lo que dicen personajes del calibre político de Esteban González Pons y Carlos Floriano, dos individuos que no tienen empacho alguno en afirmar y empeñar su palabra que tal o cual cosa es negra, porque así se lo han mandatado, para cinco minutos más tarde decir que es blanca porque sus superiores así lo han decidido. En todo esto del caso Bárcenas se han cubierto ambos de gloria. No se puede llegar, como los dos han llegado, a sobrepasar los límites del más espantoso de los ridículos. Pero a ellos qué.
Los dirigentes del Partido Popular, de la derecha de siempre, lo tienen muy claro, aunque se llegara a descubrir que fue la derecha la que mató a Manolete, sus diez millones de votantes les seguirían otorgando su confianza. Afortunadamente en este país hay unos cuantos millones más que se lo piensan muy bien a la hora de dar su voto, sea a quien sea. Eso como se debe de hacer. Como se debe dar algo que es la única propiedad real que tienen los ciudadanos: El voto. Darlo por “enamoramiento” es algo, que respetando opiniones, me parece como poco irreflexivo y irresponsable.
En esa arenga dominical de Esteban González Pons, este, como no, volvió a intentar crear dudas sobre la honestidad de los socialistas y dijo, lo escuché en el Telediario, pero el lunes no apareció en la prensa escrita, no sé porqué, que “los socialistas deberían explicar porqué motivo cuando gobernaba Zapatero los bancos le condonaron la deuda al PSOE”. De esto de las condonaciones bancarias a los partidos siempre se ha hablado y yo estoy convencido de que así ha sido, al menos en lo que respecta al pago de los intereses de los préstamos concedidos, no tanto en lo que respecta al capital principal, pero a todos los partidos en general, no solamente a los socialistas. Si se diera el caso de que al Partido Popular no le hacen falta los bancos como parece querer dar a entender González Pons, se podría llegar a pensar, si nos fijamos en lo que se ve en los papeles que circulan por ahí últimamente como consecuencia de lo de Bárcenas y en el caso de que fuera cierto lo que en ellos se dice, que al PP no le hacen falta los bancos porque su financiación viene dada por las “donaciones”, posiblemente desinteresadas, de esas empresas dedicadas a la construcción. Se puede llegar a pensar. Pero esto son especulaciones. ¿Especulaciones?
Para rebajar la tensión acabo con una adivinanza: ¿A que no sabe usted en que se parece la sede del Partido Popular a un gimnasio lleno de boxeadores? En que en la sede popular sus principales dirigentes van todos con las manos vendadas, como los boxeadores, pero no para ponerse los guantes sino por haber puesto las manos en el fuego por algunos. En fin, antes de arengar hay que tener muy claro de que se va a hablar. Rima.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home