El pluriempleo de Pujalte

Las declaraciones que en un intento por justificar la supuesta irregularidad en que haya podido incurrir el diputado nacional Vicente Martínez-Pujalte como consecuencia, al igual que Federico Trillo, de haber llevado a efecto, a través de su empresa, trabajos de asesoramiento y consultoría, ya sea de forma oral o escrita, a un empresa constructora que mantiene relación con distintas administraciones públicas, son algo que los ciudadanos de a pié no llegamos a comprender y mucho menos a asimilar. Es algo que se escapa a nuestro conocimiento. El argumento dado por Pujalte es el de que el pluriempleo es algo que el Estatuto del Diputado autoriza y que él en su condición de tal ha practicado y por lo visto sigue practicando, aspecto este que no ha tenido el menor reparo en reconocer. El estatuto dirá lo que dirá pero a la gente de a pie le extraña muy mucho que un cargo público, en este caso un diputado, asesore a empresas constructoras relacionadas con las administraciones públicas. Esto del pluriempleo es, al parecer, algo que tiene que ver con la consanguineidad, ya que su hermano, Antonio Luís Martínez-Pujalte, concejal en el Ayuntamiento de Elche, desempeña tres trabajos, el de concejal, el de profesor universitario y el de asesor del presidente del Congreso de los Diputados, Jesús Posada, o sea que se podría decir que cobra tres sueldos, si no es así espero que me corrija y rectificaré públicamente, mientras algunos millones, de españoles no tiene un solo trabajo y por tanto no perciben sueldo alguno. Esta argumentación de Vicente Martínez-Pujalte, para mi bastante peregrina, me ha traído recuerdos y entre esos recuerdos hay uno que me lleva a referirme a aquellos políticos que están bajo el estatus de la dedicación exclusiva y por ello cobran sueldos muy jugosos. Obvio el señalar el significado de “dedicación exclusiva”, no creo que sea necesario. A este respecto recuerdo especialmente el caso de la actual alcaldesa de Elche, Mercedes Alonso, que durante cuatro años (1999-2003) estuvo bajo tal condición como diputada provincial al propio tiempo que trabajaba en su despacho de abogada. Por este hecho y durante esos cuatro años, cobró de la Diputación más de 32 millones de las antiguas pesetas, algo que se puede comprobar si tenemos en cuenta la tabla que al respecto publicó este diario el 8 de abril de 2001, en la que figuraban todos los diputados provinciales de aquella legislatura. Dicha tabla nos desglosaba todas las circunstancias de este modo: “Nombre”: Mercedes Alonso García (en el caso de la alcaldesa). “Competencias” Portavoz del Gobierno. “Sueldo”: 8.198.651 pesetas. “Otras ocupaciones”: Concejal en Elche y ejerce como abogada. Así se manifestaba literalmente en dicha tabla. Tengo en mi poder sentencias del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía y del Tribunal Supremo que, en casos iguales al de Mercedes Alonso, dictaminaron en su día la irregularidad que suponía el acogerse a la dedicación exclusiva y cobrar por ello y al propio tiempo desempeñar las labores propias de su actividad profesional, por lo que en mi opinión considero que no había lugar ni causa alguna que justificase el cobro de esos 32 millones de las antiguas pesetas. Ambas instancias judiciales conminaron a los que “disfrutaban” de esta condición a decidirse por una u otra actividad, a la política en exclusiva o la profesional privada. Añado lo de “privada” a lo de “profesional” porque hay muchos políticos que ya han hecho de la política una profesión. Unos cuasi lo han conseguido y otros están en ello. “Con 24 horas a los ciudadanos de “a pié”, en muchas ocasiones, se les suele quedar al día corto para poder ejercer su actividad habitual. Sin embargo no parece, sobre el papel, que ese tópico responda a la labor de algunos de nuestros políticos. Con una fórmula más propia del “pluriempleo” muchos de ellos compaginan competencias públicas, cargos en sus partidos y hasta, en algún caso, sus trabajos privados. ¿Cómo lo hacen? Sólo ellos lo saben” (INFORMACIÓN: 8-IV-2001). El titular era el siguiente: “Vivir como un marajá”. Los cargos que desempeñaba Mercedes Alonso en la Diputación eran, al margen de los de portavoz del Gobierno provincial, el de diputada de la Mujer y Juventud y el de concejal en Elche, a lo que había que añadir la atención a su despacho de abogada. Puesto a recordar y a pensar, pienso si en las elecciones municipales que se avecinan, la actual alcaldesa de Elche, Mercedes Alonso, renovará su promesa electoral hecha en mayo de 2011, de entregar su sueldo a Cáritas, algo que no sabemos si ha llevado a la práctica, pero hay indicios más que suficientes para pensar que no. Creo que con la entrega a esta ONG de aquel viejo coche de propiedad municipal que utilizaba el anterior alcalde, esta institución benéfica ha quedado más que cumplimentada. En ocasiones resulta curioso el hecho de que actitudes que dan pie a mil conjeturas y habladurías nos llevan a recordar viejos sucesos.